AVÍSAME SI VES QUE HE DESPERTADO MUERTO
álbum hectográfico sobre biblioteca particular
Había poco menos de 300 volúmenes: comprados, robados, rescatados, leídos, muy leídos, recordados, olvidados. Era una biblioteca.
Era mi biblioteca.
Había cientos de fotografías. Eran testimonios, eran imágenes documentales, era no-ficción.
Eran mis retratos de habitantes de mundos periféricos, gente triste, gente rabiosa, gente rota, gente resistente, gente que hizo la guerra, gente que la padeció, gente arrojada a luchar.
Era gente luminosa.
Había un artefacto que pretendía ser una imprenta casera. Era una proto-fotocopiadora, un juguete predecesor de las máquinas xerográficas.
Era una simple plancha de gelatina. Era una técnica.
Era un proceso que podía deshacer la resolución, la definición, la fidelidad fotográfica.
Era un hectógrafo.
Mi vida nómada, un día, dejó a los libros sin casa. La biblioteca entera se desarraigó y se hizo refugiada en un sótano casi lúgubre. Nadie los tocaba, nadie los leía.
Las fotografías eran mapas de bits, unos y ceros alojados en discos duros, que debe ser similar a habitar un sótano casi lúgubre. Esas imágenes eran seres dormidos que, bien usados, servían para invocar, desde el fondo de mi memoria, a los originales, aquellas personas que se encontraron con mi cámara alguna vez.
Luego vinieron largas derivas, sistemáticos vagabundeos por calles, plazas, parques y escondrijos donde fui liberando uno a uno los libros.
Afortunados viandantes encontraron, de repente, libros colgando como extraños frutos de la rama de un urapán, o bajo una cornisa de ladrillo a la vista, o en el marco de una ventana diminuta.
Aunque no me quedé para ver cómo se los llevaban a casa, asumo que todos fueron dichosamente adoptados.
Antes de liberarlos, los libros habían sido alterados: a cada uno le faltaban una o dos hojas elegidas al azar.
avísame si ves que he despertado muerto
es un libro, un libro monstruo, una suerte de Frankenstein compuesto con trozos de otros libros.
Una colección de retratos de fantasmas, de apariciones.
“avísame si ves que he despertado muerto”
es una colección de “estampas”, de mono impresiones por transferencia hechas con un hectógrafo.
Aquellos retratos son las matrices, las imágenes a transferir.
Las hojas robadas a los libros liberados, son el soporte de la transferencia, donde la nueva versión del retrato va a fijarse.
AVISAME SI VES QUE HE DESPERTADO MUERTO
AVÍSAME SI VES QUE HE MUERTO
AVÍSAME SI HE DESPERTADO
SI HE MUERTO
AVÍSAME SI VES
* * *